Me gusta Gran Hermano. También me gustaba MYHYV hasta que me aburrí de ver a la presentadora siempre con su gesto desagradable harta de aguantar las mismas tonterías de cada día. Plana como una tierra sin Aristóteles, el pinganillo más expresivo que ella. Un programa a la baja con el activo más caro pasando de él como si la responsabilidad de levantarlo fuera exclusiva de la audiencia. Me gusta Gran Hermano. Que tiene mucho que ver, qué le vamos a decir a ustedes, el 32% a pesar de no tragar con ese que presenta el tomate y el sálvame en medio de un plató que le queda pequeño al ser tan ancho de culo y estrecho de orejas. El caso es que Toñi ha llegado a las escaleras de los viceversos y Toñi está viva, que eso es muy importante. Manda callar manda respetar exige educación y todos siguen en su mundo de yupi pero con una batuta que agrada al espectador, que hace que todo parezca menos sórdido, más natural, como si uno saliera por la puerta de su portal con el destino esperándole lleno de viceversos a diestro y viceversas a siniestro. Esto último le pasa mucho a matamoros pero esto ya era antes de Toñi, así que ese ejemplo no cuenta. Bravo Toñi, bravo. Me apunto otra vez a los viceversos simple y llanamente porque no tengo que soportar lo desagradable que me resultaba una Emma García apática y cobrando por nada.
Y la esperanza llega ahora. En este momento en el que me atrevo a dirigirme a ustedes para decirles que si el presentador de un programa se siente herido en lo personal porque cargan en la redes sociales contra él no puede utilizar la plataforma de su trabajo para venirse arriba y mofarse de la audiencia en general, esto de en general es importante porque aunque es lo que hace, la mayoría de los que integran los datos del share pasan de él y prefieren centrarse en los de dentro de la casa que es de lo que realmente se trata. Y claro, si yo me dirijo a ustedes como una minoría exclusiva tan exclusiva que puede que sea la única persona realmente afectada en este asunto de abandonar el concurso por culpa de quien lo presenta, entonces parece que pueden aparcar la reclamación sin problema alguno en la papelera que les pille más cerca. ¿Ustedes saben lo humillante que resulta escuchar en la misma frase imbéciles, gilipollas y 32 por ciento? Donde pongo la frase pongo la gala, ya me entienden. Pues es muy humillante sí, porque es para reírse con más ganas de nosotros. Aún así en las conciencias queda de la misma forma que Toñi Moreno ha pasado a dignificar un formato que estaba completamente corrompido y ha conjugado perfectamente el verbo libertad con libertinaje. Esperen, que no son verbos, los habré confundido por el movimiento.
A Jorge le pasa lo contrario que a Emma. Este activo de ustedes está demasiado vivo y lo que necesita es un poco de formol con anestesia para que se conserve la gracia natural pero con dos tonos por debajo. Se ve que por instagram liga poco. Que le bajen los humos, tampoco hace falta más. Me da mucho asco ver presentar Gran Hermano al señor Jorge Javier Vázquez. Utilizo la palabra asco porque es la que él utilizó para dirigirse Olvido Hormigos. Qué asco le daba, qué asco, sólo porque se defendía y no dejaba que la humillaran y la vejaran de aquella manera con la excusa de haberla sentado a cobrar por contar lo que fuera de su vida. Será que ellos no cobran por preguntar aquello que escupen. Un invitado no es un saco para descargar frustraciones. Ni el público tampoco. Ni la audiencia. Sucio presentador haciendo de cada gala de cada martes y cada jueves un gran remolino en el que pretende que todo lo acontecido en la casa de Guadalix y fuera de ella pase por el centro de sus paneos panegíricos. El ancho de banda y estrecho de zambomba. Me parto. A su derecha y a su izquiera hay currelas, gente que madruga para hacer Gran Hermano todos los días, gente que quisiera cobrar lo que él pero que no cobra y gente que ni chitón a lo que le manden como todos por aquí fuera. A él le molesta ser el payaso de los abucheos y el payaso de los sorpassos, pone la cara y y el cheque pues que se meta la carga donde más le gusta con el cargo de un buen profesional pero que no arremeta contra las indignaciones naturales con fundamento de quienes no están conformes con la forma de actuar de los que llevan Gran Hermano de las paredes de Guadalix a las de Cantora o con la forma de mantener los movimientos con apariencia fraudulenta que para eso son creados con todas sus consecuencias.
Igual que siempre he defendido que con que sólo haya una persona, sólo una, que mande un voto, sólo uno, con la ilusión de aportar su apoyo a un concursante es suficiente, ese euro y pico es suficiente para que no se consienta la mínima manipulación en el sistema de las votaciones. Independientemente de que se emita lo que interese al programa, de que se guionice a los concursantes, en cada uno está interpretar lo que está pasando o lo que se está mostrando. A estas alturas todos sabemos de quién es el concurso y de quién el dinero. Cada uno lo gaste a su antojo. Les quiero explicar todo esto desde una posición razonada para que entiendan también que lo razonado de mi reclamación no es algarabía en un saco roto con más de lo mismo todo revuelto. La gente habla de manipulación porque no emiten los contenidos fuertes en los que se retratan algunos de los concursantes. No entienden que seguramente sea porque no es lo mismo una plataforma en directo de 24 horas donde la casa es la casa y eso trasladado a una emisión de un programa editado puede que tenga por fuerza mayor que ser omitido por impedimientos legales o éticos o del índole que sea, pues apelo a ustedes para que tampoco se transmita el recochineo, la sorna, la prepotencia, la vejación, humillación, insolencia con que este indecente trata cada martes y cada jueves a los defensores de los concursantes, al público que asiste o a los que ya tenemos suficiente con los cortes ingleses y demás cortes publicitarios como para aguantar sus insolentes y asquerosos cortes de mangas. No sé si podrían tener en cuenta a mi favor que mañana domingo nos pidió que fuéramos a verle al Cartuja Center. Con dos cojones. Desde su plataforma de Gran Hermano. #GALASVIPGJ. Aquí sobra algo y aquí falta algo. El Domingo a la Cartuja y al Debate que le den, como él no lo presenta. Función un par de horas antes, y qué, o sea, que termina cuando empieza el Debate. Nadie vamos a salir corriendo de la platea a casa para enchufar la tele. Primero tendremos que tomarnos algo para digerir tanta multiplicación de este señor y sus grandes éxitos. Luego ir al parking, sacar el coche, parar en los semáforos en rojo, ceder en las rotondas, aparcar y subir. Para entonces la Barneda seguro que ya se ha ido. No es ni medio normal esta tensión y ansiedad que nos genera el orden de los productos de su cadena. Solamente les pido que ya que está en tantos sitios este señor, ¿no nos lo podrían ustedes quitar de Gran Hermano? Qué les cuesta.No sé. Será mucho pedir. Tampoco se trata de borrarlo de la faz de la tierra. Nosotros seguiríamos jugando. Miren cómo aquí estamos pasando olímpicamente de lo que está sucediendo en la casa. Eso al Super no le tiene que hacer ninguna gracia. El mérito de este presentador está en el revolution aquel que se fue para no volver, el treinta y dos del que alardea en su caso es un absoluto demérito. Este señor les frena, les frena los porcentajes, y si no miren a Toñi. Gran profesional. Hasta cierto punto claro, como todos cuando, donde y como podemos.
Con que le empujen un poquillo y lo saquen de Gran Hermano sería suficiente. Gracias
|