de cómo unas valientes Paulita y Shaima sirven para concursar y una Alejandra falsa y bienqueda como apoderado sin rejón sirve para salvar el concurso dejando a dos es-pec-ta-cu-la-res concursantes dentro de la casa (I)

     Toda la noche en vela solamente para colocar bien el título y ahora que nos tenemos que lanzar a los leones para convencer de que sí se puede optar por la tercera opción optante en una terna de tres nombres (tres eran tres, y tres son tres las opciones), va y se nos echa la hora de desayunar encima, y quién se atreve a tocar ahora la puta cafetera, eh, quién...

     En cuanto arreglemos este pequeño problema técnico y vuelva Edzmunda de preguntar al Zuper y de colocar bien los cables a nuestra querida Merceditas, seguimos...

     Pero id pensando en esas tres opciones, siempre la más inútil la más beneficiada, así que no desperdiciemos dos excelentes concursantes ignorando la opción de poder votar a la callada, bienqueda, falsa y traicionera Alejandra dentro de la casa, que luego ni Sócrates* encuentra explicación a las grandes verdades de las insulsas finales...

*Su inconformismo lo impulsó a oponerse a la ignorancia popular y al conocimiento de los que se decían sabios, aunque él mismo no se consideraba un sabio, aún cuando uno de sus mejores amigos, Querefonte, le preguntó al oráculo de Delfos si había alguien más sabio que Sócrates, y la Pitonisa le contestó que no había ningún griego más sabio que él (Apología 21a)..." (ay esta Edzmunda, lo mismo nos sirve para un picoteo que para un wikipedio...)

continuará..